jueves, 1 de abril de 2010

El éxito


¡Gracias por todos vuestros comentarios, votos y cumplidos! :)  Me alegro de poder anunciaros que hemos ganado el segundo premio en el concurso Giner de los Ríos organizado por la Consejería de Educación de la Embajada de España en Polonia.

¡Hasta pronto!

martes, 9 de marzo de 2010

No es el final,
es un inicio


Llegamos al fin. 

¿Cómo nos ha ido en el trabajo?
¿A duras penas, pasando horas en la biblioteca, hojeando un montón de libros? Es cierto que podría haber sido un trabajo realmente duro, debido a que hemos elegido un tema muy extenso y complicado.
Sin embargo, nuestro objetivo no era enseñar sólo lo que podíais leer en cualquier enciclopedia; intentábamos trasmitir algo más que la sabiduría libresca. Queríamos mostraros nuestro punto de vista que a veces nos obligaba a salirnos del tema, otras veces a entrar en él más profundamente.

Esperamos que pronto nos encontremos en el camino del flamenco porque para nosotras un final significa un nuevo inicio.


  
¡Hasta pronto!

lunes, 1 de marzo de 2010

Salir a la pista



Es cierto que se podrían pasar horas y horas hablando de ese arte: grande, misterioso e ilustre.
Sin embargo, ¿qué es lo que realmente sabemos del baile flamenco si no hemos sentido ni una vibración del claqué en nuestro cuerpo? ¿Qué podemos decir sobre él si no hemos sentido el olor del sudor mezclado con el perfume, si ni siquiera hemos oído el crujido de faldas o el son de una expresiva canción? Nos hemos dado cuenta que ha llegado el momento de sentir el flamenco en nosotros mismos. Por eso nos dirigimos a la escuela de baile “MaxDance” para asistir a una clase de la danza flamenca, desgraciadamente sin Karolina, que no pudo venir con nosotras y seguramente ahora lo sienta. Provistas de nuestros trajes (y de un miedo indescriptible), acompañadas además por una excelente fotógrafa (nuestra amiga de clase, Ola gracias a quien hemos logrado realizar también una pequeña sesión fotográfica) entramos por la puerta y...

Una sala vacía llena de silencio. Pero sólo hasta la llegada de un grupo especial de unas once bailaoras. Por una hora, este lugar tan común y ordinario, se convertirá en el escenario de un espectáculo extraordinario.
Si pensáis que para bailar flamenco basta con tener un cierto sentido del ritmo y unos buenos tacones para marcarlo, os estáis equivocando. Así pensábamos nosotras antes de salir a la pista. Al comenzar, el flamenco resulta ser un baile realmente duro. Lo confirma la instructora, Marzena Klin: “Es uno de los estilos mas difíciles. El equipo cambia muy a menudo porque todos quieren ya obtener un resultado, un brillante efecto y eso requiere muchísimo trabajo. Eso es lo que desanima a la gente. A pesar de ello, hay un grupo de mujeres que no perdieron las ganas de bailar el flamenco y desde hace unos años siguen practicándolo”


Desengañadas dejamos de bailar por un instante y aguzamos los oídos (así como los ojos). Observamos atentamente lo que va a pasar. La instructora les enseña nuevas figuras a las bailaoras, les cuenta en voz alta para que no pierdan el compás. Es curioso: las mujeres no se limitan a copiar los gestos de la maestra, sino que los experimentan en su cuerpo, intentan hacerlos a su manera, de forma única. Una añade un gesto de manos, otra agita la falda, desde el otro extremo de la sala se oye un simple tacoteo...

Despacio empezamos a entenderlo todo. Suenan las primeras notas y ya no quedan dudas: para bailar el flamenco no tienes que llevar una falda preciosa, ni saber de memoria todos los pasos. Lo único que tienes que hacer, es tratar de romper el hielo, liberar tu voz que sueles ahogar, sacarla desde muy dentro.
Enderézate, confía en ti, lánzate con decisión. Déjale a tu cuerpo vocear todo lo que guardas en tu corazón, porque, como dicen: “El baile flamenco convierte a una mujer tímida en atrevida, para quien el mundo se hace un espacio maravilloso, lleno de intensos colores y sonidos”.


Descubrid más fotos de Ola que, al fin y al cabo, dejó su cámara y también salió a la pista.














La visita a una clase del baile flamenco fue una lección muy importante. Nuestras conclusiones son las siguientes:
1. Si el flamenco llegó a nuestra ciudad: pequeña y bastante poco desarrollada, tiene que estar en todas partes.
2. Si lo bailan las chicas de 19 años igual que las mujeres de 50, lo pueden aprender todos.
3. Y por fin: si después de la clase, en todas las caras se ven sonrisas, tiene que haber algo especial en esta forma de pasar el tiempo. Algo que llena el corazón de alegría y felicidad.

Estamos convencidas de que algún día volveremos aquí para empezar nuestra aventura con el flamenco. 


miércoles, 24 de febrero de 2010

Flamenco en Polonia


Hace tiempo que el flamenco salió de España y empezó a recorrer todo el mundo. Primeramente, llegó a los países de América del Sur, donde se enriqueció con los nuevos ritmos: la bossa-nova y la salsa. Luego enamoró a casi toda Europa. En Polonia también tiene sus fieles admiradores. Esa forma de expresión no deja indiferente a nadie, consigue unir a la gente de diversos ambientes, despertar las emociones en todos los públicos.

¿No lo creéis? A ver...

Indialucía es un proyecto que logra unir dos estilos musicales totalmente distintos: el indio y el flamenco.
“Mientras las producciones de diseño del “flamenquito” en España llevan ya dando vueltas en el mismo callejón sin salida, convirtiendo el arte en fórmulas predecibles, la originalidad de este proyecto ha sido toda una bocanada de sonidos frescos para mis oídos saturados por las mencionadas fórmulas ya cansinas”.
Para demostrároslo, os proponemos un experimento. Comparad la versión original de la canción “Tres notas para decir te quiero” (podéis escucharla a la derecha, en la sección “OYE COMO VA” de nuestro blog) con la versión de esa misma canción, pero interpretada por los músicos de Indialucía. ¿Cuál de las versiones os gusta más?




Otro ejemplo: Marta Dębska, una polaca con alma gitana que empezó a bailar flamenco por casualidad, cuando sus amigos le sugirieron que lo eligiese porque se parecía a una gitana. Tras el viaje a Andalucía, no tuvo dudas de que el flamenco iba a ser su segunda vida. Durante su carrera, ha actuado junto a genios del flamenco, como por ejemplo: Andres Peña, Juan Carmona, Melchior Campos y Carmen Fernández. Con su marido ha abierto la escuela de baile “Triana” y ha creado un grupo musical llamado “Los Payos”. Han comenzado a organizar el festival “Arte flamenco”: un proyecto internacional que, desde hace ya un par de años visita distintas ciudades en toda Polonia.


Si todavía no estáis seguros, mirad estos reportajes (ambos narrados en polaco, aunque se oyen también bastantes enunciaciones en castellano):
-El capítulo dedicado especialmente al flamenco de un programa de viajes, llevado por Wojciech Cejrowski (el programa ganó el premio New York Festivals 2008 para el mejor programa de viajes y turismo).

-Un reportaje sobre Katarzyna Burgiel, una bailaora polaca y su amor por flamenco.

domingo, 21 de febrero de 2010

Festivales y concursos



Aunque en algunas grandes ciudades de Andalucía la gran feria flamenca dura todo el año, merece la pena conocer los nombres y las fechas de los festivales flamencos más importantes de España:

Festival de Madrid (febrero) : los espectáculos de baile y de teatro.
Certamen Nacional de Córdoba (mayo) : el concurso nacional más importante y prestigioso.
Festival de Jerez (mayo): el evento más importante en la ciudad de Jerez de la Frontera.
Festival de la Guitarra de Granada (junio/julio).
Festival Nacional de Cante de las Minas de la Unión en Murcia (agosto): el concurso para los artistas jóvenes.
La Bienal de Sevilla (septiembre/octubre).
Fiesta de la Bulería de Jerez (septiembre): una gran feria del fin de semana celebrada en la corrida de toros.



Sin embargo, para sentir el flamenco, basta con visitar Andalucía: irse a cualquier ciudad, en cualquier tiempo, ya que resulta muy difícil decidir cuál de estos eventos elegir. Lo único que es cierto: vayas cuando vayas, siempre sentirás el flamenco en el aire.